Admira360 es la evolución de la técnica AIDA que constituye la esencia de nuestro método de trabajo.

AIDA es el acrónimo que se obtiene al fusionar las iniciales de cuatro palabras: la A de atención, la I de interés, la D de deseo y la A de acción. Es una técnica muy utilizada en marketing para explicar en cuatro etapas el proceso de venta. Lo primero, captar la atención del cliente. Lo segundo, suscitar su interés para remover su motivación. Lo tercero, desatar su deseo exhibiéndole los beneficios. Y lo cuarto conseguir su acción. De esto modo quedaría definida en cuatro fases la secuencia de venta.

Pero asombrar significa mucho más que vender, por eso requiere del cuidado de dos fases intermedias más: la reposición, esto es, la capacidad de colocar cada cosa en el lugar y el momento adecuados. Y el mensaje, esto es, la habilidad de contar lo que se quiere a quien se quiere y cómo se debe. Porque para que algo sea admirable y provoque admiración no sólo basta con que se lo lleven. Tiene que provocar contemplación. Veamos cómo queda la secuencia WOW aplicándole el método Admira360 mediante un acrónimo inverso (esto es, de atrás para adelante).

Para ser WOW y asombrar primero debemos llamar la Atención. Acto seguido, debemos Reposicionarnos en el lugar y el momento oportunos para conseguir concentrar el interés de nuestro público objetivo, y no de otros más difíciles de impresionar. Reposicionados hay que suscitar interés. Y atesorado este llega el momento de elaborar con mimo nuestro Mensaje. Un buen Mensaje es el alma de todo WOW. El motor de un Deseo continuo e irrefrenable y la mayor garantía de una Acción final beneficiosa y fiel.

Así que, si quieres admiración, éste es tu método. Un método envolvente de 360 grados que busca exprimir todo el potencial de cada una de las seis variables en juego.